«…cristianismo es Amor y nosotros no conocemos todavía el Amor. Es decir, que el Amor se ha convertido en un egregor. ¿Se dan cuenta ustedes de la diferencia que existe entre el Amor y el egregor del Amor? ¿O la diferencia que existe entre la personalidad real de Cristo y el egregor de Cristo que han construido las generaciones y las humanidades a través del tiempo desde que aconteció el hecho glorioso?»
De la conferencia Los Egregores, 1 de enero de 1981