Cuando el Maestro imparte enseñanza a sus discípulos, sugiere siempre lo esencial y más oportuno para la obra que debe realizar cada uno en el mundo. Posteriormente entra en acción la conciencia cerebral o física, que recoge de la enseñanza lo que puede ser actualizado inmediatamente para el servicio a los demás. Y es en este centro de conciencia cerebral en donde se definen las dos grandes corrientes de servicio del Ashrama, dentro del Plan de enseñanza que el Maestro ha impartido, una intelectual apta para la mayoría y que abarca sin distinción a todas las personas cultas del mundo, y otra eminentemente espiritual o esotérica que forzosamente sólo podrá llegar a pequeños núcleos o minorías selectas en el orden espiritual. El Ashrama es algo completo en su aspecto de función integradora de la vida. Es el árbol con frutos de intuición pero firmemente apoyado y sustentado en terrenos de conocimiento material o concreto de la vida. Sus miembros sólo persiguen un definido propósito, amarse mucho y sinceramente entre ellos tal como enseñó y practicó Cristo entre Sus discípulos, y servir íntegramente al mundo, llevados por la inspiración del Alma, cuyo instinto natural de Amor sólo puede ofrecer frutos de abnegación, de servicio y sacrificio.
La Jerarquía, Los Ángeles Solares y la Humanidad, págs 75 y 76