La gran familia de los discípulos

El vínculo espiritual que enlaza entre sí a los diferentes discípulos de un Ashrama en el desarrollo específico de un trabajo insinuado por el Maestro, es la simpatía atrayente, la amistad sincera y la cordialidad jovial del trato. Constituyen una especie de gran familia, dentro de la cual se le asigna un valor especial a la impersonalidad y a la realización del trabajo en el cual todos se hallan empeñados.

Todos los discípulos espirituales del mundo -tal como dice frecuentemente el Maestro- “son guerreros curtidos en mil batallas” y su reencuentro en el mundo dentro de sus grupos respectivos no se debe al azar, sino que es el testimonio de una acción perfectamente organizada de acuerdo con las oportunidades que ofrecen las incidencias kármicas en la vida de cada discípulo.

Mis experiencias espirituales. Vicente Beltrán Anglada. 1ª edición digital, pág 92