«Démonos cuenta cómo de manera imperceptible, aunque progresivamente, cede en nosotros la habitual tensión intelectual del pensamiento y nos sentimos proyectados hacia aquellas zonas de quietud y de recogimiento espiritual que preludian la revelación de las grandes verdades cósmicas. Pese al tremendo dinamismo que inflama los éteres planetarios y que converge en nuestro diario vivir, una nueva gravitación se revela en el corazón del ser humano y un nuevo sentimiento de honradez y de sinceridad hace posible que en muchos sectores de la vida social humana se realicen las proféticas palabras de Cristo de que “…Todos somos Unos en el Seno del Padre…”
Conversaciones Esotéricas, 1ª edición digital, p.162