“Hay una serenidad en la contemplación de todo cuanto nos rodea, serenidad o expectación en el sentido de que todo cuanto vemos no queremos alterarlo, está bien tal como está, incluso el mal cuando se lo considera así desaparece, porque de una u otra manera no luchas contra el mal, y como que no luchas no puedes tener reacciones.”
La Integración Energética en el Ser Humano, conferencia 13 agosto 1981.