«La música, para mí, es lo más importante para sublimizar la vida del hombre, me refiero a la música, no a los ruidos. Y hay que tener en cuenta que los pobres devas del éter están fastidiados a veces por esta tendencia moderna a transmitir ruidos y no música…»
La Relación Espacio-Éter, conferencia 12 de marzo de 1988
“El instinto musical que va despertándose en muchos seres humanos en los momentos actuales, debido a la aproximación dévica, forma parte integrante de este proceso de estructuración del lenguaje universal. Una gran cantidad de Egos humanos que reencarnaron en los tres últimos lustros llevan en su interior, como herencia preciosa de la evolución del sonido, este instinto musical que les conecta, sin que ellos se den cuenta, con el mundo dévico.
En términos ashrámicos, a estos Egos se les denomina ‘piedras musicales’ y deben constituir la base del lenguaje del futuro. Por poco que se analice esta idea, se observará que la evolución, en lo que hace referencia a la fonética del lenguaje, tiende hacia la musicalidad y que la unión fraternal entre los seres humanos y los Devas deberá realizarse a través de la música como sistema de acercamiento y contacto.”
Los Misterios de Shamballa, 2ª edición electrónica, p. 178.