La labor del discípulo

La labor de un discípulo siempre tiene un trasfondo social. No podemos hablar de un discípulo sin que trabaje, socialmente hablando, en el seno de la sociedad donde el Maestro «Karma-Dios» le ha situado, allí debe trabajar, en su ambiente familiar, en su ambiente profesional, en su ambiente nacional o local y en su ambiente planetario, debe trabajar siempre, cada cual recibirá en orden a su trabajo las energías cualificadas que constituyen su propia medida, no podemos sobrepasar la energía que podemos contener en nuestro pequeño Santo Grial.

Conferencia 6 octubre 1985
 

Sólo hay una atención y es un deber social

Interlocutor. – La atención desarrolla la intuición y se nota una disminución de la memoria, pero la sociedad actual en la que vivimos exige para ciertas cosas un desarrollo memorístico. Entonces, ¿se pueden simultanear ambas cosas, o se trataría de no hacer el juego a la sociedad y de no alimentar a la memoria porque es incompatible con lo otro, o se trata de solamente ir aumentando la intuición y la memoria que se tenga vale?

Vicente. – No hay dos atenciones en nosotros. La atención hacia una cosa y hacia lo que estoy diciendo son la misma cosa. Es un deber social el estar atentos y en esta medida tendremos más memoria.  Sucede que no estamos muy atentos y por esta razón tendremos que hacer un esfuerzo para estarlo, con lo que creamos memoria. Cuando la atención sea una virtud, espontánea, sencilla y natural, lo demás vendrá todo por añadidura. La atención hacia el trabajo profesional, por duro que sea, es igual que la atención hacia Dios, ¿qué ha variado? la magnitud, pero, es la misma atención. ¿Acaso no estamos sujetos a una jerarquía de atención?, hay quien está más atento y tendrá más memoria, no es que haga un esfuerzo sino que en la atención ya está la propia memoria, surge como una emanación natural de la propia atención. ¿Qué sucede con el conocimiento que viene del pasado? Pues que no hay que matar lo que viene del pasado sino que estando muy atentos no le permitiremos el acceso a estos núcleos mentales en los cuales deberíamos funcionar. Una persona que trabaja tiene que estar atenta al trabajo, y si se quiere amar a los demás tendrá que estar muy atenta a los demás, y si se quiere ser un buen trabajador laboral se tendrá que estar muy atentos a lo que se está realizando. Pero hay que empezar aquí y ahora a estar atentos, no mañana, y así hemos creado esa fuerza que nos lleva a estar firmemente creyentes en la reencarnación, y no diré que no exista, sino que hay que prescindir de ella para no posponer nuestra actividad presente para el futuro, porque, si es así, siempre estaremos condicionados por el tiempo.  ¿Quién manda en nuestra casa interna sino nosotros?, pero hay que estar muy atentos a todo cuanto suceda dentro y fuera de nuestra casa.
 
Conferencia 24 mayo 1986.
 

Trabajemos aquí y ahora

Interlocutor.— Justamente quería preguntarle cuál es el rol de la mujer en apoyo del tercer milenio.¿Cuál sería el mensaje para la mujer del tercer milenio?.

Vicente.— Bueno, yo creo siempre y estoy convencido de que no hay que esperar ningún milenio para trabajar. El trabajo siempre es aquí y ahora, por esto los tiempos han cambiado absolutamente, incluso las previsiones jerárquicas para esta era no son las mismas que fueran un código vigente hace sólo cincuenta años. Significa que la vida se va renovando. Sucede, sin embargo, que el que no se renueva somos nosotros y, naturalmente, como no nos renovamos decimos el tercer milenio o veinte milenio, porque estamos aquí y el milenio siempre está allá. Podemos esperar que el milenio esté acá y que nosotros como grupo estemos trabajando ya, y que estemos introduciendo el milenio ya en nuestras vidas. O, por ejemplo, otra de las grandes ilusiones: la Constelación de Acuario o la Era de Acuario. ¿Para qué esperar a Acuario? Ahora, sea el tiempo que fuere, podemos trabajar. No estamos sujetos al tiempo, les hablo de un mundo desconocido, les hablo de un Eterno Ahora donde no existe el tiempo, el tiempo conocido, el tiempo condicionante, el tiempo tridimensional que ataca nuestra mente y furtivamente se introduce en el corazón creando el caos. A mi entender Uds. son muy lindos y están trabajando muy bien ahora. La esperanza del milenio está aquí. Si Uds. trabajan, está aquí el milenio, no esperen Uds. el tiempo en que se produzca este milagro, si el milagro está aquí permanente en la acción. ¿Se dan cuenta? Estamos trabajando aquí y ahora, el corazón está lleno de espacio, la mente está llena de tiempo. ¿Qué sucederá cuando la mente solamente contenga espacio? Cuando no contenga tiempo, cuando no contenga cualidades, cuando no contenga ecuaciones, cuando no contenga ilusiones, cuando sólo esté llena de Verdad. La Verdad es el espacio, la disciplina buscando la verdad es el tiempo. Hay que hacer que lo que sucede en el corazón suceda en la mente, es el milagro permanente para nuestra era de grandes transformaciones sociales. Resumiendo, trabajemos aquí y ahora. Ahí está el milenio, aquí está la totalidad del tiempo.

Conferencia 6 octubre 1985

Barriendo el pasado, creando la paz de Dios

Interlocutor. – Si partimos de la esencia, ¿por qué al ser humano le cuesta tanto llegar a ella?

Vicente. – Precisamente porque nuestra mente está llena de conceptos intelectuales que enturbian la propia esencia, el propósito creador. Aquello que llamamos paz, realidad suprema, iniciación, son meras conceptos mentales y adoramos tanto los conceptos que hemos perdido de vista la realidad que origina cada concepto. El vacío es una palabra, constituye el problema con el que se ha enfrentado nuestra Mónada. Hablar del vacío creador significa que la creación solamente puede surgir de este vacío, o de la nada, cuanta más nada o vacío exista en nosotros, más creación, porque habrá más paz y comprensión de todo el orden cósmico. Pero, estas palabras son para vosotros, no para el más común de los mortales, porque estoy seguro de que en algunos momentos de comprensión profunda se ha realizado este vacío en cada uno de nosotros, y nos hemos espantado tanto al no encontrar nada donde cogernos que ha desaparecido este vacío, con la paz y plenitud. Entonces, por temor a la inseguridad del propio vacío, hemos creado otros sistemas de conocimiento, o hemos buscado en otro grupo, y así andamos, de grupo en grupo, de estructura en estructura, permaneciendo ligados a las organizaciones creadas por otros, sin darnos cuenta de que lo que estamos buscando está tan cerca de nosotros que casi nos resulta increíble, es tan solo un tamiz tan sutil que el separar esta barrera aparentemente tan sutil implica barrer todo lo que hemos acumulado desde que nacimos a la vida espiritual hasta el momento presente, y esto puede ser mucho tiempo. Al final, habremos barrido todo el pasado con sus tradiciones porque el pasado y el presente son cosas completamente distintas. Y el pasado, el conocimiento y la tradición, van creando o acumulando, materia sobre la estructura mental que se densifica cada vez más, se deforma hasta el punto de que solamente pensamos en el pasado, vivimos en el pasado y olvidamos constantemente el presente. Hay que estar muy atentos, ahora y aquí, para darnos cuenta de esta realidad. ¿Por qué hay un vacío?, porque al estar tan atentos, el pasado que crea karma, confusión y sufrimiento ha desaparecido, lo dejamos todo, y quedamos solos con nosotros mismos por primera vez en nuestra vida, y esto es lo mejor que le puede pasar a un ser humano, que se quede completamente solo consigo mismo, lo cual significa que se ha hecho cósmico, supremamente espiritual, y que se encuentra trabajando en los niveles donde se escancian los grandes licores o perfumes del Cosmos, se convierte en un Servidor de la Raza porque ha perdido por completo la idea separativa del “yo” o del «mí”. Todo esto ha desaparecido para siempre, solo queda la fragancia, esta fragancia, o radiación, que es lo que atrae a los demás hacia nosotros, que es la que nos vincula a los demás, que no trae ninguna confusión, y, por lo tanto, no trae problemas ni sufrimiento alguno porque todo queda impregnado de la Paz de Dios que se hace realidad a través de nosotros.

Conferencia 24 mayo 1986

Dios es radiación, atención suprema

Interlocutor. – ¿Qué diferencia hay entre vacío, espacio y tiempo?

Vicente. – El vacío y el espacio son una misma cosa, el tiempo nace cuando hay confusiones mentales o cuando hay problemas. ¿Cuándo miramos el reloj?, cuando tenemos problemas; si estos no existen ¿para qué queremos el reloj? Vivimos en un tiempo supremo de la naturaleza o en un vacío, en un espacio.  El Espacio es la matriz del tiempo. El vacío es la matriz del tiempo intelectual. Entonces, cuando la mente está vacía, está en contacto con el Espacio, que es lo eterno. En tanto que, cuando la mente no es Espacio, cuando la mente no está vacía completamente, cuando su campo de actividad es un semillero de pensamientos que van y vienen, dejando su lastre y su esfera de confusión que viene del pasado y de la tradición, entonces es cuando vienen los problemas en el tiempo, que es algo psicológico. Cuando estamos muy atentos, ¿dónde está el tiempo?, solamente hay espacio o vacío en nosotros, lo cual significa que somos nosotros mismos los que utilizamos del Espacio para llenar nuestro propio vacío que, en virtud de que el Espacio es multidimensional, nos hace multidimensionales por este vacío, una palabra que, aparentemente, no tiene significado psicológico alguno, pero que desde el ángulo supremamente místico es el único camino que lleva a la alta espiritualidad, al Sendero de Servicio, a la Casa del Padre, a Shamballa, que lleva a Dios por semejanza. Cuando la mente vacía es igual al espacio, se ha extinguido el tiempo, el hombre se ha convertido en un Dios, yesto es lo que hay que buscar, porque Dios es radiación, atención suprema. Pues bien, esto está a nuestro alcance, ydesde el momento en el que nos damos cuenta somos responsables de realizarlo, aquí y ahora ¿por qué esperar a mañana?
 
Conferencia 24 mayo 1986